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La sustitución de cadera por una Prótesis de Cadera es la mejor opción para poder aliviar tu dolor, recuperar la movilidad articular y mejorar tu calidad de vida ya que podrás retomar tus actividades diarias.
La operación de prótesis de cadera consiste en reemplazar la cadera afectada por una prótesis artificial. La artrosis y algunas enfermedades degenerativas pueden provocar un desgaste excesivo en la cadera, factor que nos obliga a tener que sustituirla.
Las prótesis de cadera están fabricadas con materiales de última generación, seguros y ligeros para que el paciente pueda recuperar el máximo de movilidad.
En los últimos años, la operación de prótesis de cadera en Madrid va en aumento debido al envejecimiento de la población. Si no quieres dejar que pasen los meses mientras llega tu turno en la lista de espera de la Seguridad Social, ClinicPoint pone a tu disposición a experimentados cirujanos ortopédicos a precios preferentes. Gracias a los acuerdos alcanzados con hospitales y médicos de primer nivel, con ClinicPoint el precio de la operación de prótesis de cadera en Madrid es de 8.990 euros, lo que supone un ahorro del 25% respecto al precio que ofrecen las clínicas privadas, unos 12.000 euros.
Cuando la artrosis y la artritis afectan a la cadera provocan un desgaste en el cartílago articular que recubre la cabeza del fémur. Los síntomas de este desgaste son el dolor y la pérdida de movilidad. Primero las dificultades son para la práctica deportiva pero a medida que evoluciona la enfermedad interfiere en actividades básicas como subir escaleras, atarse los zapatos o caminar.
Seguramente puedas sobrellevar estos síntomas durante varios años recurriendo a medicamentos, pero finalmente, necesitarás que te coloquen una prótesis de cadera para recuperar tu calidad de vida.
Cuando acudas a la consulta con el especialista antes de realizarte la operación de prótesis de cadera en Madrid, te someterá a una exploración física y a una serie de preguntas para comprobar tu movilidad y el grado de molestias y dolor. Del mismo modo te indicará las pruebas radiológicas (radiografías, TAC, resonancia magnética... en función de cada caso) y las pruebas preoperatorias (analítica, electrocardiograma, etc.) que debes hacerte y llevarle antes de la operación de prótesis de cadera.
Y es que la edad, el sexo, la altura, si hay o no sobrepeso o la calidad ósea del paciente son condicionantes a la hora de escoger la prótesis más adecuada y el abordaje quirúrgico.
Existen distintos diseños y materiales para la elaboración de las prótesis de cadera. Ya sea una prótesis de cadera de metal, de cerámica o de polietileno (un tipo de plástico), con la cual el riesgo de rotura es muy bajo además de que otorgan gran estabilidad a la cadera sin apenas desgastarse.
Es el cirujano ortopédico el encargado de elegir el tipo de prótesis de cadera que mejor se adapte a tus necesidades y cómo la colocará, si calzada a presión para que el hueso pueda seguir creciendo alrededor de los componentes, cementada o bien una combinación de ambas técnicas.
Puede tratarse de una prótesis de superficie, en caso que solo sea necesario reemplazar la cabeza del fémur y el acetábulo (parte cóncava de la superficie de la pelvis). Están fabricadas con metal. Este tipo de prótesis de cadera suele colocarse en hombres menores de 70 años y en mujeres por debajo de los 60 años ya que implican conservar el hueso para que la capacidad de recuperación sea mayor minimizando el riesgo de luxaciones. Además, si fuera necesario podría sustituirse por una prótesis de cadera total en un futuro.
Las prótesis totales están indicadas cuando hay que sustituir la cabeza y el cuello de fémur y el acetábulo. Lo habitual es reemplazar el cuello del fémur por una pieza fabricada con titanio que se introduce en el hueso del fémur y se fija por presión o con cemento. En función de la edad, la condición física y las expectativas del paciente se escoge el material de la superficie del acetábulo y la cabeza del fémur ya que están en continuo contacto y son las que posibilitan el movimiento.
La operación de prótesis de cadera siempre debe realizarse en un hospital y por un cirujano experto en Ortopedia y Traumatología.
La intervención se realiza bajo anestesia general o epidural y tiene una duración aproximada de dos horas.
El primer paso consiste en realizar una incisión vertical de unos 20 cm de longitud que le permite al cirujano acceder a la articulación. Puede ser en la nalga, en la cara externa o en la cara anterior de la cadera.
Luego mediante una sierra, se secciona el fémur y se extrae la cabeza del fémur que la parte de hueso deteriorada que se sustituida por la prótesis. El interior del hueso se ha de perforar para que en él se pueda introducir el vástago (una parte de la prótesis) que puede ir fijada con cemento óseo, aunque no siempre.
A continuación se trabaja en la zona del acetábulo que es la parte de la pelvis en la que se coloca la cabeza femoral y debe quedar perfectamente ubicada ya que de esta articulación dependerá el movimiento.
Una vez ensambladas todas las piezas de la prótesis de cadera, el cirujano revisará los tendones y ligamentos que se hayan podido ver afectados durante la intervención para repararlos en caso que fuera necesario.
Finalmente se coloca un drenaje y se sutura la incisión por capas de tejido para lograr el mejor resultado posible.
Deberás permanecer ingresado en el hospital entre cuatro días y diez días antes de recibir el alta para poder supervisar como vas evolucionando después de la operación de prótesis de cadera.
Justo antes de abandonar el hospital el cirujano y fisioterapeuta te darán instrucciones que debes cumplir para una recuperación óptima.
La tasa de complicaciones después de la cirugía de reemplazo de cadera es muy baja. Si los días posteriores a la intervención aparece fiebre, enrojecimiento, dolor a la presión o inflamación de la herida puede que esté desarrollando una infección que se controla fácilmente con antibióticos.
Hoy en día los materiales con los que se fabrican las prótesis permiten un nivel de movilidad similar al de la articulación original. No obstante, el grado de movilidad que tuvieras antes de colocarte la prótesis de cadera y la rehabilitación postoperatoria, serán determinantes en tu recuperación.
Actualmente las prótesis de cadera puedan durar al menos de 15 a 20 años.